Sicarios asesinan a hombre y bala perdida impacta en niña de 5 años. Sicarios de 15 años capturados, que habrían aprendido a matar ya a los 12 años. 3 muertos y 2 heridos de gravedad dejan ataque de sicario. Un menor de 14 años figura entre los fallecidos.
Esa es la normalidad del Callao. Noticias de todos los días, de todas las semanas. Nuestros hijos creciendo entre delincuentes y soñando con ser uno de ellos. Madres que ven como sus hijos caen ante el virus más grande que sufrimos los chalacos: La delincuencia. Y ahora, que sube cada vez más la violencia, aumentan también los sicariatos y ya son pan de cada día.
Esperamos dormir tranquilos, poder llegar a la casa o sentarnos a conversar en una plaza. No queremos vivir nosotros enrejados, son los delincuentes los que tienen que estar tras las rejas.
Queremos caminar por un parque, disfrutar la noche chalaca, mirar las estrellas o simplemente volver a la casa tranquilos. Pero no podemos.
Esa es la realidad del Callao. La del abandono de los niños y jóvenes en manos de delincuentes, narcotraficantes y participantes del “negocio familiar”. Las madres pierden a sus hijos y los chalacos su futuro. Líderes de bandas que tienen 14 años. Otros jóvenes de 15 posando con armas de fuego, luciendo sus trofeos. Detenidos que incluso portan el uniforme de su colegio.
Si no acabamos con la delincuencia de raíz, vamos a terminar siendo gobernados por el sicariato y quizás, eso ya está sucediendo.